La deshidratación por bebidas
alcohólicas, o veisalgia, es también llamada guayabo y produce sed excesiva,
dolor de cabeza, vómito, mareos, dolores gástricos y fatiga.
Probablemente, en estas fechas
experimente este tipo de deshidratación, a raíz de la ingesta de licor, que
entre otras cosas, se considera una sustancia diurética, ya que incrementa la
producción de orina.
“Se estima que por cada 50 gramos de alcohol en 250
mililitros de agua, el cuerpo elimina el doble o hasta el triple de agua en
forma de orina, es decir, eliminamos más líquido que el que estamos
ingiriendo”, explica el especialista Arturo Cristán Frías.
Le tenemos una mala noticia: no se han inventado
una cura definitiva para este problema. Pero no pierda la esperanza: sí le
tenemos unas recomendaciones para ese 23 % de las personas a las que no les da
guayabo, según un estudio publicado en el Current Drug Abuse Review.
¿Qué hacer?
1. Beba (pero nada con licor)
Si tiene guayabo es porque usted está deshidratado.
No se preocupe, no es tan grave. El alcohol causa eso en su cuerpo y por eso es
probable que haya empezado el año con dolor de cabeza, sequedad en la boca y
vómito. El mejor remedio está inventado hace años: el suero oral.
Puede conseguirlo en droguerías -sobres en polvo o
líquidos con sabores frutales- o prepararlo en casa mezclando 1 litro de agua
hervida, 2 cucharadas de azúcar, 1 cucharadita de sal, 1 cucharadita de
bicarbonato y, si quiere, zumo de limón.
No sirven el café -que según la ciencia es
diurético, entonces tiene un efecto contrario a lo que necesita hoy- ni otros
tragos. O sea, olvídese del mito de que pasa la cruda con una “cervecita”.
2. Reponga lo que perdió
Las soluciones electrolíticas (como
bebidas para deportistas) y los populares caldos son buenos para reponer las
sales y el potasio que se pierden por el consumo de alcohol.
Estas bebidas hidratantes tienen una mezcla de agua
y sales minerales (sodio, potasio, magnesio, fructosa) que ayudan a reponer las
pérdidas de líquido y electrolitos o sales minerales que ocurren como
consecuencia de la sudoración, en este caso, de la pérdida intensa de agua.
El caldo de gallina, por su parte, contiene altas
cantidades de fósforo, lo que promueve el buen funcionamiento del riñon.
3. Algunos medicamentos ayudan
Tomar analgésicos puede ayudarle a lamentar menos
los excesos de la noche anterior. El ibuprofeno es una buena solución aunque
debe tener cuidado si tiene problemas de hipertensión. Los médicos también
recomiendan evitar el abuso de cualquier medicamento que contenga paracetamol
(acetaminofén) pues puede causar daño hepático cuando se combina con alcohol.
4. Descanse lo suficiente
No le exija mucho a su cuerpo, pues él está
dedicado a recuperar sus niveles normales de sales, minerales y otros
compuestos.
¿Se puede evitar el guayabo?
Los especialistas afirman que tomar agua a medida
que toma los tragos de alcohol, ayudará a disminuir la deshidratación a raíz
del consumo de esta sustancia.
El guayabo, fuera del alcohol, lo generan químicos
producidos en la fermentación, en especial los congéneres, que son más
abundantes en licores oscuros como tequila, brandy, whisky, vino tinto y
cerveza negra. Uno de ellos, el metanol, se descompone en toxinas como el ácido
fórmico y formaldehído.
También incide la deshidratación. El hígado
convierte el alcohol en otros químicos, dice el médico Aaron Michefelder, que
deben expulsar los riñones pero como hay ausencia de fluidos esas toxinas no
son eliminadas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario