Seuxis Hernández Olarte, más conocido como Jesús Santrich continúa con
la huelga de hambre argumentando supuestas irregularidades en su detención. Su
único alimento en estos 12 días de detención son aguas aromáticas y los
medicamentos que toma habitualmente para sus enfermedades. A pesar de que un
médico lo visita tres veces al día en su celda, Santrich se ha negado a recibir ayuda profesional,
hasta el punto que no se dejó inyectar suero vía intravenosa para mantenerlo
hidratado, según informó el Inpec.
El líder del partido político FARC, Jesús Santrich, fue enviado el pasado 17 de abril a la cárcel
La Picota, sur de Bogotá, donde permanecerá detenido mientras
se resuelve su situación jurídica ante
el pedido de extradición hecho por Estados Unidos. Santrich fue capturado por la
Fiscalía junto a Marlon Marín, sobrino del exguerrillero Iván
Márquez; Armando Gómez, alias El Doctor; y Fabio Simón Younes, en cumplimiento de una circular roja de
Interpol.
De acuerdo con el último reporte médico, el exguerrillero continúa con los niveles de
glucosa bajos, por lo que está en riesgo de perder el
conocimiento en cualquier momento, lo que obligaría al personal de sanidad de
la cárcel La Picota a trasladarlo a un centro asistencial. Asimismo, este
viernes se le habilitó una colchoneta adicional en el piso de su cama en caso de que el exlíder sufra de algún
ataque de epilepsia, ya que Santrich padece esta enfermedad.
El pasado jueves la Defensoría del Pueblo realizó
una visita de inspección a la celda del exmiembro de las Farc para verificar
cuáles eran sus condiciones de reclusión. Tras la visita, la entidad informó
que Seuxis Hernández Olarte está en
una celda digna y en buenas condiciones. De igual modo, resaltó que a pesar de
que está débil de salud, sus condiciones sicológicas son buenas.
La visita se hizo a petición del director de La
Picota, coronel Germán Rodrigo Ricaurte Tapia. El defensor Carlos Alfonso Negret señaló
que Santrich “se encuentra recluido solo, en una celda digna,
en buenas condiciones, con servicios de agua y luz, y en un pabellón amplio: el
Pabellón de Alta Seguridad B”.
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