· Las autoridades locales y departamentales siguen pidiendo apoyo del Gobierno Nacional.
Los incendios forestales, que se han presentado en
la última semana, consumieron cerca de 3.000 hectáreas de bosques del Guaviare,
en el corazón de la Amazonia. Aunque ya está controlado el de La Macarena,
según datos del Ministerio de Ambiente, aún hay activos siete, de los 24 que
había la semana pasada. Al parecer detrás de esto hay manos criminales que
buscan ampliar la frontera agrícola.
Por esa razón, se instaló el Puesto de Mando Unificado
en el que se priorizó el incendio de Cerro Azul para atenderlo inmediatamente
“porque está en una zona en la que se encuentran vestigios de pinturas
rupestres, patrimonio arqueológico, no solo del departamento, sino de la
Nación. Además, hace parte del escudo Guayanés de la zona de preservación de la
Serranía La Lindosa”, informó la viceministra de Ambiente, Yaneth Alegría Copete.
A pesar de que el fin de semana este foco de
incendio estaba controlado, ayer el ministro de Ambiente, Luis Gilberto Murillo, dijo , que en
este sector se reactivó el fuego ya que al parecer, personas de la comunidad se
han acercado a la zona, justamente, a los puntos que ya estaban controlados.
“Los incendios se nos están presentando en todo el
cordón de la frontera agropecuaria de la Amazonia. Atendemos la emergencia a
través de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo y estamos implementando un
plan de choque, el cual tiene unas medidas que incluyen la judicialización de
delitos ambientales”, explicó. En ese sentido, indicó que se designaron 5
nuevos fiscales y 100 investigadores para que se pongan al frente de este
hecho.
Informaciones confidenciales señalan que detrás de estas quemas en la Amazonia podrían
estar bandas criminales que ocuparon los territorios tras la salida de la
guerrilla de las Farc y que también controlan el tráfico de ganado y la minería
ilegal de la región. Además, entre los focos de deforestación e incendios
forestales es posible que se hayan afectado 20.000 hectáreas de bosques entre
octubre de 2017 y febrero de 2018. Eso no quiere decir deforestación, sino
afectación. “Es una guerra por la tierra”, agregó la fuente quien pidió
reserva.
Por seguridad para los viajeros, el
servicio del aeropuerto, así como el acceso a caño Cristales para los turistas,
se mantiene con restricciones según confirmaron las autoridades y los
organismos de socorro de ese localidad del Meta, por los incendios presentados
en las últimas horas.
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